Después de esta búsqueda interior y personal de gustos,
limitaciones y objetivos, el resultado se desglosa en tres elementos
que decidirán por ti: el tipo de
alojamiento, el presupuesto limitado en hospedaje y la situación
geográfica que deseas en tu estancia.
Lo primero a salir a relucir es el tipo de alojamiento. La
forma de alojamiento que tiene de momento nuestro foco de atención,
es la de las Guest House. Estas tienen la fórmula que se
asemeja más a la perfección inexistente de la que hemos hablado.
Pueden tener un precio asequible para presupuestos ajustados y
tienen cierto tipo de características que las hacen únicas.

El otro dato importante a tener en cuenta es el dinero que
estás dispuesto a gastar, ya que hay gran variedad de Guest
House según el precio, y con un ajustado presupuesto como el
nuestro, estamos hablando que, aún sin haber hecho estimaciones
precisas, para todas las noches un gasto previsto de entre 300-400
euros, con unos precios por noches que van entre 11-16 euros.
Pero claro, todo esto es aproximado, en un momento dado en
cualquier otra búsqueda podríamos encontrar algo aún más barato
o alojarnos en algo distinto y más caro de lo previsto por los motivos que sean, o incluso algunos días hacer escapadas inesperadas, sólo con
la mochila hasta donde nos lleve el viento... (o el calor). Que sí,
que más barato puede que lo haya y sé que lo hay, pero habría que
ver que ofrece, en que condiciones y sobre todo dónde.
Y es que para terminar esta entrada hay que hablar de la
importancia de la situación geográfica a la hora de decidir si un
alojamiento es descartado o no, porque esto influye directamente
en el precio final.
Sería precioso un lugar baratísimo y perfecto, pero que resulte
que esté lejos, más que lejos, en las montañas en un pueblo
perdido de la mano de Dios, y que para ir a esos lugares que más
quieres visitar indiscutiblemente, tengas que viajar 'nosécuánto'
tiempo y con ello gastar 'nosécuánto' cada día.
Por lo que esta influencia habría que tenerla en cuenta, y
ajustarnos según que se quiera hacer, dependiendo del itinerario.
Sería aceptable pagar un poco más, si ese lugar en el que estás
está en pleno centro, rodeado de todo lo que quieres visitar y así
ahorrándote por otro lado el gasto del transporte.
La situación del alojamiento se paga, y si no fuera realmente
posible estar cerca de los centros de interés, al menos que el lugar
esté conectado fácilmente con los demás puntos de referencia de la
ciudad, según tus prioridades.
Los dos distritos que de momento tenemos en el punto de mira son
Jongno-gu y Mapo-gu, de los cuales ya hablaremos y daremos motivos
más adelante.
Ah, y el desayuno incluido, otro importante elemento a tener en
cuenta... ¿no?